Protesta contra la OTAN en Madrid. España. Foto: (Getty/Europa Press/Jesús Hellín)

La OTAN es un aparato militar, surgido a partir de la firma de un tratado en 1949, entre un grupo de potencias imperialistas (EE.UU., Francia, Italia, Reino Unido, entre otras.), para defenderse mutuamente en caso de guerra con otras potencias imperialistas. Siendo la principal potencia imperialista en el mundo, EE.UU. domina al interior de la OTAN, y además de utilizar sus propias fuerzas (EE.UU. tiene más de 200 bases militares por todo el mundo [1]), también utiliza las fuerzas de sus aliados de la OTAN para extender su dominio entre los países de Europa Oriental y Oriente Medio. Un ejemplo de esto fue en 2001, cuando EE.UU. invadió Afganistán con apoyo militar de la OTAN.

El pasado 29 y 30 de junio, en Madrid, se realizó la Cumbre de la OTAN, cuyo tema principal era la actual invasión de Rusia a Ucrania. A continuación, algunos de los acuerdos establecidos en la cumbre:

1- Aumento del gasto militar por parte de las principales potencias imperialistas de la OTAN;

2- Aumento de las tropas de la OTAN en territorio europeo, pasando de 40.000 soldados a 300.000 el próximo año;

3- Declaración de Rusia como «la amenaza más significativa y directa para la seguridad de los aliados y para la paz y la estabilidad de Occidente»;

4- Declaración de China como un «desafío sistémico para la seguridad euroatlántica»;

5- Mayor presencia militar de EE.UU. en Europa, para lo cual enviará 100.000 militares más, así como el refuerzo de la infraestructura militar estadounidense.

Esta cumbre y las anteriores conclusiones, evidencian la creciente pugna entre las potencias imperialistas y sus respectivos preparativos para la guerra. El imperialismo yanqui está movilizando sus fuerzas y presionando a sus aliados de la OTAN para alinearse bajo su mando, y así hacerle frente a Rusia y China, que son las dos potencias imperialistas que actualmente desafían sus intereses económicos y políticos como superpotencia hegemónica mundial. Todo lo anterior se hace mucho más necesario y urgente, debido al desenvolvimiento de la crisis económica, razón por la cual los recursos estratégicos, el control de las colonias que poseen dichos recursos, y el dominio de la economía mundial, cobran mayor importancia para poder salvar sus economías. Así pues, las grandes potencias imperialistas, bajo la presión de sus economías en crisis, se alistan para la guerra, una guerra por un nuevo reparto del mundo, donde los países oprimidos del tercer mundo somos parte del botín.

Miles de personas protestan en Madrid contra la cumbre de la OTAN. Foto: Reuters 2022