Fuente: BBC-REUTERS

El pasado 24 de febrero se cumplió un año de la agresión del imperialismo ruso a Ucrania, invasión que ha cobrado la vida de miles de personas. Según las cifras de la ACNUDH -oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos- hasta el 13 de febrero se registraron 7.199 muertes que incluyen niños, mujeres y hombres. También se han registrado impresionantes cifras de desplazamiento. Según la Acnur – Agencia de las naciones Unidas para los Refugiados son 7,7 millones de personas que desde Ucrania han engrosado las densas filas de refugiados en países de Europa principalmente.

Bajo esta guerra, que es una guerra injusta por parte del imperialismo ruso sobre el pueblo de ucrania, cientos de ucranianos hoy resisten por defender la nación y se enfrentan no solo a las condiciones desiguales bajo las que se desarrolla la guerra, sino al gobierno títere de los yanquis, encabezado por Volodímir Zelenski, quien ha tomado posición por el imperialismo yanqui y por poner la nación ucraniana a su servicio.

Desde la madrugada del 24 de febrero del 2022, el presidente de Rusia Vladimir Putin, anunció al mundo una “Operación militar especial” hacia el país vecino, con el supuesto objetivo de desnazificar ese territorio, justificando la invasión a la nación ucraniana con el argumento de “defensa propia” para acabar con lo que Putin denominaría “una amenaza para la soberanía del estado de Rusia y sus intereses”. Además el Kremlin afirma que esto se hace para poner fin al genocidio que se  ha cometido por parte del gobierno de Zelenski hacia la zona del Donbás – región histórica ubicada al este del país, controlada en parte por rebeldes prorrusos- que desde el 2014 había ganado un referéndum para la anexión a Rusia.

Bajo esta excusa se da inicio a esta guerra pero lo que poco se ha difundido en los medios es que hay más de un interés para desatar la agresión a esta nación. Si bien hay informes que afirman que grupos de este carácter han sido impulsado por el gobierno títere de Zelenski, hay un interés no solo en reprimir la existencia de pobladores rusos sino de acabar con aquellas personas que aún estaban por levantar el legado de la lucha anti -fascista que se había dado la zona cuando la bandera roja de la unión soviética cubrió estas naciones

Los imperialistas pugnan por el nuevo reparto

La agudización de la crisis actual, que ha venido anunciando el resquebrajamiento de los imperialistas, donde la invasión a Ucrania es producto de sus intentos voraces de invadir, de someter a las naciones,  generar guerras y huir, en ultimas del interés de establecer una mayor profundización de la dominación hacia los pueblos del mundo, es la condición natural a la que los ha llevado sus intereses mezquinos de generar guerras para mantener su posición hegemónica. Bajo estas condiciones hoy se desarrolla la pugna y la alianza entre imperialistas.

En el terreno internacional la agresión del imperialismo Ruso  a Ucrania se expresa como la contradicción entre naciones oprimidas por un lado y superpotencias y potencias imperialistas por el otro, siendo Ucrania la nación oprimida y Rusia la potencia imperialista (que también es superpotencia atómica)

Veamos porque esto es así:  Ucrania es una nación oprimida. Desde que se da la restauración capitalista de la URSS- Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas- muchos de los países que la conformaban pasaron a ser colonias o semicolonias de la URSS que devino en socialimperialista.

Precisamente Ucrania es uno de ellos. Si bien en 1992 obtiene una independencia formal, lo que hace en los hechos es entregar las armas al imperialismo ruso, poniéndose al servicio de sus intereses y sujetándose a su sometimiento a través de deudas con este país. Por su parte los gobiernos de turno han sido fieles lacayos del imperialismo. Si echamos un breve vistazo a los últimos gobiernos de Ucrania podemos observar que estos se han alternado la administración del estado dependiendo del grado de alcance de los imperialistas: Yanukovich quien fue presidente de Ucrania, fue aliado del imperialismo Ruso, ahora Zelenski es un fiel lacayo del imperialismo yanqui. Cada uno de ellos ha cumplido labores esenciales para la injerencia de los diferentes imperialistas dentro de la nación ucraniana.

Por otro lado está la contradicción interimperialista, que en este caso sería entre el imperialismo ruso y el imperialismo yanqui. Es importante aclarar que esta no es la principal en este momento. Considerando tal afirmación, se debe establecer que  las actuaciones de las diferentes  superpotencias y potencias han tenido repercusiones. El imperialismo yanqui busca ganar posiciones sobre Rusia, para esto ha lanzado un cerco, usando la resistencia del pueblo ucraniano para llevar al imperialismo Ruso al desgaste máximo y concluir en una repartición de las naciones oprimidas, en este caso Ucrania. Con este fin el imperialismo yanqui usa la esfera de influencia que tiene sobre otros países imperialistas europeos a través de la OTAN, presionando a que rompan con la dependencia energética con Rusia, ejemplo de lo cual fue el sabotaje del Gaseoducto Nord Stream dos. De esta forma busca tener a los “aliados” bajo su mando y aislar y acorralar al imperialismo ruso.

Esto para las potencias imperialistas es un juego de ajedrez, todos quieren ganar sin importar a costa de qué, mientras sus intereses se mantengan. Quieren convertir a cada una de sus colonias y semicolonias en patios traseros. 

En lo que concierne a los intereses actuales de los imperialistas frente a Ucrania, no se vislumbra aun como tendencia principal el escalamiento a una guerra mundial, aspecto al que los mismos imperialistas y los medios burgueses han dado resonancia. Se ha amenazado con iniciar la tercera guerra mundial, situación que no se descarta, pero con la experiencia práctica y con los resultados del actuar del imperialismo no se ve que ese sea su objetivo por ahora. Incluso de parte de Estados Unidos la nueva Estrategia de Seguridad Nacional (ESN) adoptada por Biden anuncia como prioridad la competencia con China en los mercados internacionales, puesto que el ultimo tiempo el imperialismo Yanqui a recibido derrotas importantes – retirada de las tropas en Afganistán- que han debilitado su actuar en las naciones oprimidas y llevan a pugnar por mantenerse como la superpotencia hegemónica única.

La resistencia del pueblo ucraniano

Los hechos han demostrado que el imperialismo ruso  buscaba una victoria fácil sobre el pueblo ucraniano ante sus agresiones, cosa que no le ha resultado según sus deseos pues durante este año la agresión, los bombardeos, los desplazamientos se han encontrado con la heroica resistencia de la nación ucraniana, que independientemente de cuales sean las fuentes que les han permitido dotarse de armas para resistir, se han lanzado en contra del invasor ruso.

Varias imágenes han capturado el momento en que mujeres y hombres se han enlistado para sabotear los planes del imperialismo ruso, al que no le queda por el momento más camino que ir bajándose de sus planes macabros contra el pueblo ucraniano.

Esto último lo ha demostrado con los anuncios del retiro de tropas rusas de Jerson, importante ciudad de Ucrania. El retiro de las tropas no se produce por la buena voluntad rusa sino porque ésta ciudad fue liberada por el pueblo después de la invasión, hechos que demuestran los costosos fracasos para el imperialismo ruso, no solo en cuanto a desarrollar la guerra si no en cuanto a mantenerla. En esta situación tiende a buscar salidas desesperadas, como negociaciones que hasta hoy no son del todo claras pero que apuntan a pactar con los demás imperialistas. Lo que se sabe por el momento es que el imperialismo ruso baja sus ambiciones y se mantiene en los mínimos de que se le ceda la zona del Donbás completamente.

La resistencia manifiesta el deseo del pueblo ucraniano por conquistar una verdadera independencia de su nación, una encuesta demuestra que el 84% de los ucranianos estaban en contra de hacer concesiones a Rusia dentro de la nación si se llegaran a dar negociaciones entre los imperialistas y los traidores vendepatria como el lacayo de Zelenski, e incluso han manifestado el anhelo de recuperar Crimea – territorio que fue anexado por Rusia-.

Hoy el pueblo ucraniano del cual se resalta su decisión por no desfallecer en la defensa de su nación, tiene la tarea de alzar más alto su bandera de la resistencia, y no permitir que ni que el imperialismo ruso ni que el imperialismo yanqui ni ningún otro de los imperialistas lleve a último término sus maquinaciones en las que pretenden la rendición del pueblo para sacar el lápiz y la escuadra y medir cuanto les corresponde de la nación ucraniana.