
Recientemente hemos publicado un Reporte del Primero de Mayo en Colombia, en el cual mostramos un panorama general de la jornada en varias ciudades del país. Te invitamos a leerlo si aún no lo has hecho. A continuación, publicamos un complemento con un breve reporte específico de la ciudad de Manizales, el cual nos fue enviado por un colaborador y reportero en aquella ciudad.
El primero de mayo en Manizales mostró un gran apoyo de las masas que salieron a movilizarse por sus derechos, también los intentos de represión por parte de las autoridades de la ciudad, y la influencia del reformismo petrista en las consignas de muchos sindicatos.
La jornada comenzó en horas de la mañana, múltiples sindicatos y organizaciones se reunieron en la avenida Santander. Varias de estas organizaciones, alineadas con la política reformista y conciliadora de clases del actual gobierno colombiano, entregaron folletos y propaganda en apoyo a las reformas y la consulta popular. Las dirigencias politiqueras dentro del movimiento obrero, aprovecharon el primero de mayo internacional y revolucionario, y todo el foco de atención de las masas manizaleñas, para hacer populismo.
Alrededor de las 10:00 a 10:30, la Policía Metropolitana, fuerza reaccionaria del Estado y la Alcaldía, llevaron patrullas exigiendo a los manifestantes que dejaran la mitad de la calle para la circulación de los vehículos. La indignación de las organizaciones y de las masas no se hizo esperar. Una patrulla hizo burla de los manifestantes, mencionando que “mataremos a más de ustedes”. Estos episodios se repitieron en varias ocasiones, donde la policía trató en varios momentos de cerrar las calles y mantuvo en vigilancia las manifestaciones del primero de mayo. Esto provocó serias tensiones y una evidencia de que realmente las fuerzas del Estado querían frenar las protestas.
¿Qué enseñanzas podemos sacar del primero de mayo en Manizales? Por un lado, la participación de las masas trabajadoras y sindicatos de todo tipo, muestran en esencia la necesidad de las masas de pelear por sus derechos. Por otro lado, la lucha de las masas obrero-campesinas no se limita solo a las calles, los revolucionarios deben luchar por impulsar una auténtica línea de masas y elevar la conciencia de clase, en lucha contra el reformismo y la conciliación.